SANTO DOMINGO. A los dominicanos les ha tocado sobrellevar este 2016 con una gran merma en sus ingresos. Mientras se discuten las posibles condiciones para una reforma fiscal, el Gobierno ha ido “picando a’lante” , sacando recursos de los bolsillos de los contribuyentes a través de aumentos de tasas diversas.
Vale recordar que el año inició con el “reajuste” pendiente de la Ley 253-12 , popularmente conocida como la del “paquetazo fiscal”. Por esa legislación, el Impuesto a la Transferencia de Bienes Industrializados y Servicios (ITBIS) aumentó este año de 13% a un 16% en productos de consumo masivo y cotidiano, tales como la mantequilla, el café, los aceites comestibles, el azúcar, chocolate y yogurt.
Delfina Castillo, una ama de casa que reside junto a su esposo en Los Alcarrizos, presupuestaba en el 2015 un monto de RD$4,000 a la semana para la compra del supermercado. No tiene hijos. Este año, para poder adquirir los mismos productos debe disponer de por lo menos RD$6,000 cada semana.
Pero Delfina también tiene vehículo propio, por lo que este año tendrá que destinar RD$300 más que el año pasado para poder renovar su marbete. Eso, porque la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) decidió incrementar ese impuesto de RD$1,200.00 a RD$1,500.00 a los vehículos de año de fabricación hasta el 2011; y de RD$2,200 a RD$3,000.00 a los del 2012 en adelante.
A la señora se le suma el combustible, pues para esta fecha del 2015 el precio del galón de combustible era de RD$188.70 la gasolina premium y RD$171.10 la regular; el gasoil regular era a RD$142.30, y el GLP a RD$82.00.
Esta semana, la escala de precios que publica el Ministerio de Industria y Comercio es de RD$201.80 para la gasolina premium; RD$186.70, la regular; RD$149.30 el gasoil regular y RD$96.70 el GLP.
Como Delfina, la población dominicana ha cargado con estos y otros aumentos y sus consecuencias.
Este mes, el Gobierno anunció la eliminación del subsidio de 3,800 galones de gasoil que entregaba a los transportistas, quienes, a su vez, no lo pensaron mucho para compensarse con aumentos de RD$5.00 en los pasajes. Algunas rutas que no han aumentado, mantienen la amenaza de hacerlo.
Los peajes fue otro de los impuestos con los que el Gobierno ha ido deprimiendo el bolsillo de los ciudadanos. Desde el pasado 5 de septiembre se aplica el “ajuste por indexación” que se traduce en un aumento de los peajes de las autopistas Duarte, Las Américas, Sánchez, 6 de Noviembre, La Romana y la del Coral.
El aumento fue por tipo de vehículo, de modo tal que el conductor de un carro que antes pagaba RD$30.00, ahora paga RD$60.00 para poder cruzar; el minibús pasó de RD$60.00 a RD$120.00, y así, de forma sucesiva. Ello trajo como consecuencia un incremento de los pasajes en las rutas al sur y al Cibao de entre RD$5.00 y RD$10.00.
Y si alguno viaja o consume alcohol, este año también hubo un incremento en el costo de expedición del pasaporte y en el Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) de bebidas alcohólicas.
La población ha tenido que hacer frente a cada incremento con un salario que se mantiene invariable.
Rafael (Pepe) Abreu, presidente de la Conferderación Nacional de Unidad Sindical (CNUS) estima que hay trabajadores que llevan hasta diez años sin recibir un incremento de salario.
“Con el sector privado tenemos la ventaja de que las tarifas se revisan cada dos años, pero siempre queda el tema de los trabajadores que quedan por encima de los mínimos, que como están en ese nivel, te encuentras con gente con cinco y diez años que no le aumentan. Se revisan los mínimos nada más y, entonces, esos se estancan”.
Por eso está pidiendo al sector empresarial convocar el Comité Nacional de Salarios para hacer una revisión adelantada de los sueldos. La última se hizo en 2015, cuando se logró aumentar 14% al mínimo.
Abreu aspira a un aumento salarial de 30% en las grandes, medianas y pequeñas empresas, a los guardianes, trabajo de campo, agricultura, turismo y sector zona franca. Recuerda que la escala más alta aprobada dentro del mínimo fue de RD$12,873.00, monto que se queda por debajo del costo de la canasta básica en el quintil más bajo que, según el Banco Central, es de RD$12,939.71 a septiembre pasado.
Pero los empresarios -dice- se niegan a revisar, alegando que el plazo es hasta el 2017. Abreu, que ve con preocupación la situación, teme que la presión lleva a un estallido social, similar o peor que la de. 1984.
El sociólogo José Antinoe Fiallo Billini, entiende que el país ha venido acumulando una serie de situaciones que llevan a lo que él denomina el “quille social”. No sabe si será mañana, pero cree que en cualquier momento se puede producir un gran estallido.
“Problemas de circulación urbana, el encarecimiento de los costos del transporte, deterioro de la aceras y las calles, el abastecimiento del agua, el problema de los apagones, los ruidos urbanos, la bulla, el manejo temerario. Se están acumulando muchos factores que producen ese ‘quille’, y es un fenómeno progresivo; llega un momento que puede producir el estallido social. Si no estamos en eso, nos estamos acercando mucho”, considera Fiallo.
Fuente:Diario Libre