La vacuna denominada Covishield surgió del proceso productivo realizado por el Serum Instituto de la India en colaboración con la Universidad de Oxford y AstraZeneca, en el contexto de una transferencia de tecnología”.
Está compuesta de una versión debilitada de un virus del resfriado común (conocido como adenovirus) de chimpancés y la misma se ha modificado para que se parezca más al coronavirus, sin causar enfermedades.
Como toda vacuna, cuando se la inyecta en el organismo, hace que el sistema inmunológico comience a producir anticuerpos y lo prepara para atacar cualquier infección por coronavirus. La misma se la administra en dos dosis entre cuatro y 12 semanas de diferencia.
Según su fabricante, se puede almacenar de manera segura a temperaturas de 2 a 8 grados Celsius, aproximadamente lo mismo que una heladera doméstica, y se puede administrar en entornos de atención médica existentes, como los consultorios médicos o farmacias, por lo que constituye una gran ventaja frente a competidores como la de Pfizer-BioNTech, que actualmente se administra en varios países, y debe almacenarse a -70 ° C, moviéndose un número limitado de veces.
Los ensayos clínicos internacionales de la vacuna Oxford-AstraZeneca demostraron que cuando las personas recibieron media dosis y luego una dosis completa, la efectividad alcanzó el 90%. Pero no había suficientes datos claros para aprobar la idea de media dosis y dosis completa. Los fabricantes indios de la vacuna, aseguran que Covishield es “altamente eficaz” y está respaldada por los ensayos de fase III realizados en Brasil y Reino Unido.
Fuente: elcaribe.com.do